Vestidos de Comunión

Si tenéis la suerte de vivir en Santiago podréis conocer directamente una colección de vestidos de Comunión que me parece particularmente bonita. Es la colección de Lunares en Mayo, una tienda de moda infantil situada en la calle Alfredo Brañas, 20. Si no tenéis la oportunidad de verla in situ podéis hacerlo a través de su web o bien de su blog (www.lunaresenmayo.blogspot.com).
Yo he intentado plasmar la delicadeza de sus vestidos, adornos florales y collares a través de esta colección de recordatorios. Espero que os gusten!



Todo un placer

Aún faltan unos días para que Lucía haga su primera Comunión pero yo me quiero adelantar para felicitarla y darle las gracias a Concha, su mamá. Creo que nos entendimos a la perfección desde el primer momento y para mi ha sido todo un placer conocerla y por supuesto poder pintar a una niña tan, tan guapa!! 

    Algunos bocetos...

Y el modelo elegido!!!

La fuerza del cariño

Montse, Conchi y yo hemos convivido muchas horas durante muchos años. Nos conocimos en los 90 (una fantástica década!). Un día nos encontramos y nos hicimos amigas. Ya no trabajamos juntas. Tampoco vivimos en la misma ciudad. Pero las dos forman parte de mi vida y cuando nos vemos el reloj se para. Ayer pasamos el día juntas, con nuestras familias. Madre mía, cuántos niños: Alicia, Martí, Silvia, Antón, Carla, Irene, Marc y Víctor!! Hablamos del pasado y del presente y siempre nos despedimos intentando fijar una próxima cita (ahora toca cena de chicas!!).
  


Los niños





Cuadros y topos en celeste y camel



Y, como no, las niñas!



Érase una vez...

Lo primero que me vino a la cabeza cuando vi este papel de fresas y moras fueron las ilustraciones y los cuentos de Beatrix Potter. Estaba deseando estrenarlo y hacer algo bonito con él, asi que me puse manos a la obra. Estas libretitas serán el regalo que Adriana le hará a sus amigas el día de su primera Comunión. Pero chssssssss!, que es una sorpresa!!! (Muchas felicidades, Adriana!!!)

Tengo un secreto...

Las cajas y paquetitos siempre me han gustado. De pequeña lo guardaba todo, todito, todo: cromos, flores, palitos, cristalitos, conchas,...Todo aquello que era "especial", para mi nada vulgar, me apetecía guardarlo. Eran mis secretos! Así que me puse muy contenta cuando mi amiga del alma Montse me pidió que le ayudase a "empaquetar" unos regalitos para Marta y María, unas amigas de su hija Carla. Mientras hacía las cajitas pensaba en los secretos que guardaría yo en ellas si fuese niña otra vez...